Me gustaría compartir un interesante artículo del heilpraktiker alemán Markus Breitenberger, que leí cuando estuve en Alemania hace unas semanas. En este tratado, el autor, que también es homeópata, enfoca la catástrofe del reactor atómico en Japón y el miedo a la alta radioactividad y las enfermedades consecuentes, también en el resto del mundo, desde la perspectiva de los elementos uranio y plutonio y su utilización en la homeopatía clásica.
En dos palabras, la base físico/química es que el plutonio y el uranio enriquecido, normalmente combinados con oxígeno como material combustible, se utilizan en reactores de agua ligera como el reactor del bloque 3 de Fukushima, para producir energía.